Análisis mercados junio

Existe una máxima que dice que cuando todo el mundo está de acuerdo en que algo va a suceder, pues no se da. Algo similar ha pasado con los mercados financieros en esta primera mitad del año: que si el precio del petróleo; el coste de la energía; los resultados empresariales iban a sufrir… pues acabamos el semestre con unos mercados financieros cerca de máximos históricos e incluso algunos índices (Dax) por encima. Ni siquiera el susto de los bancos regionales lo ha podido parar. ¿Por qué? Varias razones, la primera: unos resultados empresariales en el primer trimestre mucho mejores que lo que se pronosticaba; una inflación en EE.UU. claramente a la baja (no así en Europa) y que el mercado no se ha creído las proclamas apocalípticas de la FED; finalmente el nacimiento de la temática “Inteligencia Artificial” que nació con la publicación de los explosivos resultados de Nvidia del primer trimestre, ya tenemos el nuevo maná.

Se habla en muchos debates sobre una nueva burbuja del mercado, hay mucho que matizar, esta última subida se puede explicar en más de un 80% por las fuertes subidas registradas por Microsoft, Alphabet, Nvidia y Meta, de hecho, el resto de las acciones mundiales han tenido un comportamiento discreto. El PER del S&P500 es de 21x, pero si excluyéramos las valoraciones de estos cuatro gigantes, dicho múltiplo apenas alcanzaría un nivel de 15x, lo que realmente deja una valoración que de ningún modo puede considerarse cara. En Europa dicho múltiplo es aún menor y si miramos áreas del mercado como acciones de países emergentes y de empresas de pequeña capitalización, las valoraciones son realmente muy atractivas, áreas donde hemos ido aumentando nuestro peso.

Este último mes, entre tanta euforia, también ha habido tiempo para tormentas pasajeras pero importantes a tener en cuenta. Hemos visto como tanto la FED como el BCE han transmitido mensajes muy agresivos, esto lo ha notado el mercado de renta fija, donde hemos visto como los bonos de gobierno han tenido pérdidas porque las curvas de tipos de interés reaccionaron al alza con estas declaraciones. Seguimos pensando que la FED no va a subir tipos, la inflación la tienen controlada y la mayor parte del efecto de las subidas de tipos acumuladas todavía no se ha reflejado, subidas adicionales consideramos que serían un error y abocaría a los EE.UU. a una recesión. En Europa el BCE seguirá subiendo tipos, pero vemos peligroso el fuerte frenazo económico en Alemania, la Señora Lagarde va a necesitar medir muy bien sus actuaciones. Que la FED y/o el BCE no acierten en sus políticas es quizás el mayor riesgo de mercado. La próxima temporada de resultados empresariales va a ser clave, veremos si siguen resistiendo y sorprendiendo al alza, de ser así los mercados continuarán marcando máximos, con permiso de la geopolítica y cualquier otro imprevisto.